¡Transforma tus platos de pasta con esta deliciosa salsa de queso sin nata!
Imagina el aroma embriagador de una salsa cremosa, con el queso derretido y el sabor intenso que se mezcla perfectamente con cada hilo de pasta. Esta receta te permitirá disfrutar de todos estos placeres sin la necesidad de usar nata, ¡una opción más ligera y saludable que no sacrifica en absoluto el sabor!
Ingredientes:
Para preparar esta exquisita salsa de queso para pasta sin nata, necesitarás los siguientes ingredientes:
Para la salsa:
- 200 gramos de queso cheddar rallado
- 200 gramos de queso mozzarella rallado
- 1 taza de leche
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cucharadita de mostaza Dijon
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
Sigue estos sencillos pasos para preparar esta irresistible salsa de queso sin nata:
Paso 1: Preparación de la base
En una olla a fuego medio, derrite la mantequilla y agrega la mostaza Dijon. Remueve durante unos minutos hasta que la mezcla esté bien integrada.
Paso 2: Incorporación de los quesos
Añade los quesos cheddar y mozzarella rallados a la olla. Remueve constantemente hasta que se hayan derretido por completo y la mezcla esté homogénea.
Paso 3: Ajuste de la consistencia
Poco a poco, incorpora la leche a la mezcla, removiendo continuamente. Ajusta la cantidad de leche según la consistencia que desees para tu salsa.
Paso 4: Sabor final
Por último, sazona la salsa con sal y pimienta al gusto, mezclando bien para que los sabores se integren. ¡Tu salsa de queso sin nata está lista para acompañar tu pasta favorita!
Ahora que tienes esta maravillosa receta, podrás sorprender a tus comensales con un plato de pasta lleno de sabor y textura, sin la pesadez de la nata pero con toda la cremosidad que aportan los quesos derretidos. ¡Disfruta de cada bocado y deja que el sabor de esta salsa te transporte a un mundo de delicias culinarias!
¿Puedo usar otros tipos de queso para esta receta?
Sí, puedes experimentar con diferentes tipos de queso para crear tu propia versión personalizada de esta salsa de queso sin nata. Prueba con quesos más fuertes o suaves según tus preferencias.
¿Se puede refrigerar la salsa sobrante?
¡Claro! Guarda la salsa en un recipiente hermético en el refrigerador y consúmela dentro de los próximos días para mantener su frescura y sabor.